1. Diseño que no grita “soy smart”:
Lo primero que sorprende es que no parecen tecnológicas. Si te las cruzas por la calle, pensarías que son unas Wayfarer normales. Pero no: tienen cámara, altavoces y hasta IA incorporada.
Y lo mejor es que pesan casi lo mismo que unas gafas comunes. Muy bien ahí.

2. Fotos y videos con solo un toque🏙️:
¿Estás viendo algo que quieres capturar? Solo tocas la patilla y ya estás grabando.
La cámara es de 12 MP, graba en 1080p y puede incluso hacer directos. Útil y cero intrusivo. No tienes que sacar el teléfono para nada.

3. Meta AI integrada — sí, como un mini asistente🤖:
Esto es lo más loco. Puedes pedirle a las gafas que traduzcan lo que estás leyendo, que te digan qué estás viendo o que busquen algo por ti.
Todo esto sin mirar una pantalla. Solo hablas… y escuchas.

4. Altavoces discretos y sonido direccional🔊🔉🔈:
No necesitas auriculares. Los altavoces van en las patillas y proyectan el sonido directo al oído. Puedes escuchar música, llamadas o al asistente sin que nadie más lo note.
No aísla, no molesta. Genial para usar en la calle o caminar.
5. ¿Y la batería? No es infinita, pero cumple🔋🪫:
Unas 4 horas de uso continuo. No es mucho, pero el estuche te permite varias cargas más, así que en el día a día aguanta sin drama.

6. Lo bueno y lo no tan bueno:
✔️ Diseño natural y cómodo
✔️ Funciones útiles sin depender del celular
✔️ Buen sonido sin invadir
❌ Cámara floja en condiciones de poca luz
❌ Precio que no todos pagarían con gusto
❌ IA aún limitada fuera de EE.UU.
Gracias por leer 👽🕶️.