El calentamiento de los teléfonos es un fenómeno normal que ocurre por varias razones. Principalmente, sucede porque los componentes , como el procesador y la batería, generan calor al realizar tareas exigentes, como correr videojuegos, ver videos en alta resolución o usar múltiples aplicaciones al mismo tiempo. Esto ocurre porque procesar más información requiere más energía eléctrica, lo que genera calor.
Otro factor importante es el entorno. Por ejemplo, si usas tu dispositivo en un ambiente caluroso, como en la playa, o lo dejas bajo el sol, el calor externo puede contribuir al sobrecalentamiento. Además, los cargadores rápidos actuales, aunque son convenientes, también hacen que la batería trabaje más intensamente, elevando la temperatura.
Para manejar este calentamiento, puedes tomar medidas simples como reducir el brillo de la pantalla, cerrar aplicaciones que no uses, evitar usar el teléfono mientras se carga, y mantenerlo alejado de temperaturas extremas. Si notas que tu dispositivo se calienta con frecuencia, revisa también la calidad de los accesorios que usas, como cables y cargadores, ya que los genéricos o de baja calidad pueden empeorar el problema.