La música es como el pan de cada día en mi vida, siempre presente y esencial. Desde chiquito he tenido un gusto inmenso por explorar todos los estilos y géneros que me encuentre. Me encanta cómo cada canción tiene la capacidad de llevarme a otro mundo, hacerme sentir de todo: alegre, triste, nostálgico, o simplemente motivado para enfrentar el día. La música es mi mejor compañía en momentos buenos y malos, y siempre encuentra la manera de hacerme recordar cosas geniales o de inspirarme a seguir adelante. Además, es una forma increíble de expresar quién soy y conectarme con otros sin necesidad de palabras. En fin, la música es mi fuente constante de inspiración y felicidad, y no podría imaginar mi vida sin ella.